Últimamente mi pequeño valiente parece haber entrado en racha de mala suerte, respecto a lo que a salud se refiere.
Hace tres semanas lo tuvimos siete días en casa con fiebre, luego se recuperó, volvió al cole una semana, y la semana pasada de nuevo cayó con fiebre otra vez. Siete días sano, es lo que duró antes de volver a enfermar.
El pasado lunes por la tarde le subió la fiebre, y no se libró de ella hasta el sábado. Parece que hemos entrado en un bucle de esos de los que es difícil salir... y resulta agotador estar atrapados en él. Y digo estar porque es toda la familia la que se ve envuelta en la espiral de virus, mi marido el que se pasa el día en casa cuidando de el peque, yo la que corre al salir del trabajo para recoger a la pequeña y que el niño no tenga que salir de casa, y la peque por ver reducidas sus actividades al estar todos confinados en nuestro hogar.