Desde hace días no me puedo quitar de la cabeza esta vieja cancioncilla de Def Con Dos. El motivo? Me he comprado unos nuevos zapatos!
Probablemente os cueste ver la relación, pero creedme si os digo que la hay.
Compré unos zapatos comodos, blanditos, de la marca Crocs. Llegué a casa y me sentía feliz con ellos, feliz hasta que los saqué de la caja. Justo encima de los zapatos, el fabricante había colocado una nota de advertencia en todos los idiomas que le parecieron relevantes. Dicha nota decía lo siguiente: " para evitar lesiones personales graves en escaleras mecánicas y en pasillos móviles: permanezca en la parte central del peldaño mirando hacia el frente; evite todo contacto con cualquier superficie próxima al movimiento de las escaleras mecánicas/ pasillos móviles o de los peldaños; pise con cuidado al acceder o abandonar las escaleras mecánicas / pasillos móviles; tome a los niños de la mano y vigílelos en todo momento.
Una vez has leído esto.....tu alegría por tener zapatos nuevos desaparece. Y nace en tu interior... el pánico. La curiosidad pudo conmigo y empecé a buscar respuestas a porque mis zapatos nuevos estaban catalogados como arma mortal. Así descubrí que por lo visto el material de la suela de estos zapatos tiende a adherirse y ser "succionado" por los laterales de la escalera mecánica, comiéndose esta tu zapato y.... tu pie. En internet podeis encontrar noticias, fotos e incluso videos en los que se ve como una escalera ingiere en un momento una bota de agua. Espeluznante.
Cabe decir que la mayoría de "victimas" de este tipo de zapatos son niños. ¿Por que? Sencillo, porque los niños son los que suelen entretenerse restregando sus zapatos contra los laterales de las escaleras.
Total, que ahora vivo acojonada. Cada vez que me pongo esos zapatos me mantego alejada al máximo de las escaleras mecánicas. Eso ha supuesto una mejora para mi, ya que hago más deporte.
Eso si, el dia que voy despistada y me subo por error en una escalera con los zapatos... siento un pánico absoluto y me pongo más rígida que un palo.
Por fin he conseguido entender una frase de película:estos zapatos me han cambiado la vida. Lo que no sé es si para bien o para todo lo contrario.