El inicio de todo, el origen de este blog

El otro día hablaba con una lectora asidua de mi blog sobre lo que significaba para mí... y eso me llevó a recordar como empezó todo...el origen de este blog.

El primer post data del 15 de diciembre de 2013, cuando mi hija tenía poco más de un año, y yo estaba totalmente superada por la bimaternidad, el paro y mi situación vital en general.

Cuando me convertí en madre por segunda vez, nada sabía de bebés de alta demanda ni de noches enteras sin dormir ni diez minutos, días en los que la única banda sonora era el llanto, el de mi bebé, el mío, el de mi hijo.... tampoco sabía nada de las complicaciones que podían surgir a nivel físico y psíquico por dejar el pañal... ni de los servicios de atención temprana... 2013 fue un año de aprender mucho, de sufrir mucho, y de superarme a mí misma en todos los niveles.

Decidí escribir el blog para reencontrarme conmigo misma, y vaya si me sirvió! Y me sigue sirviendo!

Pese a que en 2013 comencé a escribir el blog, he de admitir que no escribí demasiado... al incorporarme al mundo laboral a los pocos días de estrenarme como bloguera, mi tiempo libre por fortuna y por desgracia disminuyó, y apenas escribí 11 posts en un año!

Escribía básicamente para mí. No hacía difusión de los posts ni de mi blog... sólo algunos amigos lo conocían y lo leían... y no tenía ningún rumbo fijo... Así pasé el 2014... sin pena ni gloria, con unos 17 posts.

Ahora me parece mentira! Que lo que podría llegar a escribir en un mes... era lo mismo que escribía por aquel entonces en todo un año!

¿Cuando cambió todo? Pues fue el verano del 2015, cuando me abrí una cuenta en Twitter, y con ella, se abrieron mis ojos. Empecé a leer otros blogs de temática similar al mío, comencé a compartir mis publicaciones, y vi que había gente que me leía!!! Las visitas en mi blog empezaron a subir, empecé a interaccionar con los lectores a través de Twitter, y encontré una nueva motivación para seguir escribiendo. Por otro lado, mis hijos habían crecido, mi niño había superado sus dificultades para usar el cuarto de baño, y mi pequeñina al fin dormía. Costaba organizarse con el trabajo y la casa... pero decidí plantearme lo de escribir más en serio.

Descubrí como programar los posts, para que lo escrito de noche o el fin de semana, pudiera ser publicado al día siguiente o a media semana.

No en vano en 2015 conseguí subir a 39 posts, concentrados la mayoría en la segunda mitad del año. Era el preludio de lo que estaba por venir. El verdadero año de mi blog, el 2016, el año de los 100 posts!!!! El año en que me organicé para poder escribir un par de posts a la semana, en que dividí los contenidos por áreas temáticas, y empecé a dar forma a lo que el blog es en la actualidad.

Empecé a escribir posts desde el móvil, mientras viajaba en el ferrocarril, aprovechando cada minuto para poder continuar con mi actividad.

Nacieron también los viernes de cuento, sección fija que le dedico todos los viernes a la literatura infantil, algo que desde siempre me ha gustado.

Y esa, esa es la historia de este blog, mi blog! Un blog nacido de la adversidad, que sube como la espuma, a medida que yo supero los obstáculos que la vida me va poniendo delante, unos pequeños, otros más grandes, pero todos al fin y al cabo... superables.

No en vano una madre superada no es aquella que se deja vencer... sino la que lucha para salir vencedora en el mayor número de situaciones posibles.

De momento no tengo intención de desaparecer... sino todo lo contrario. El blog seguirá evolucionando a la vez que yo lo hago, y mientras me sirva de desahogo y te sirva a ti de entretenimiento o motivación, aquí estaré... compartiendo experiencias contigo.