Y el abrigo pa cuando!

Pues eso me ando preguntando yo desde hace unos días... y el abrigo, pa cuando?

Cuando nos confinaron por culpa del dichoso coronavirus, tanto mis hijos como yo misma llevábamos abrigo. Abrigo de invierno, a juego con sus zapatos de invierno, ya sabes... esos que son un poquito altos, con un pelín de pelito por dentro... y tal.

Por las mañanas, cuando salíamos de casa sobre las 7h, hacía bastante fresquete, aunque es cierto que a medio día o a primera hora de tarde...el abrigo empezaba ya a sobrar.

Durante el confinamiento, las primeras veces que salí a la calle para comprar al supermercado o para llevar a la conejita al veterinario, aún llevaba abrigo... Recuerdo incluso algún día de lluvia bastante fresquete.

Pero ahora, de repente, parece haber llegado el calor... y me temo que tiene ganas de quedarse.

El confinamiento nos ha robado medio mes de marzo y el mes de abril enterito. Y de momento nos está robando mayo. 

Cuando tras unos días de autorizar las salidas infantiles, me decidí a dar un paseíto con los niños, me encontré con un clima muy distinto al que había antes de que ellos dejaran de salir. Y nos vimos saliendo en bambas y sin chaqueta, apenas con una camiseta fina de manga larga... que nos estorbaba.

Me he visto obligada a hacer el cambio de armario... acelerado. Porque muchos hemos pasado de salir un día con abrigo...a salir "al día siguiente" con manga fina, en el sentido literal. Es lo que tiene pisar la calle cada quince días o una vez a la semana. Y los niños ni te cuento! Tras tanto tiempo sin salir... los pobres se extrañaban de no tener que usar ropa de abrigo.

Esto me ha llevado a reflexionar, sobre toda la ropa de entretiempo que este año se va a quedar sin usar.

La cantidad de niños que habrá que apenas hayan estrenado su abrigo nuevo... que probablemente para el año que viene ya no sirva. Esos abrigos que van a quedar nuevos... para pasar a parientes o amigos más pequeños en el mejor de los casos. Nosotros tuvimos la suerte de que este año no habíamos comprado abrigos. Estábamos acabando de aprovechar los del año pasado. 

Pero no puedo decir lo mismo de los zapatos. Esos zapatos de invierno que le compramos a Erik apenas unas semanas antes del confinamiento. Esos que apenas han pisado la calle... y que como siga este calor... no la pisarán. Y ya sé que para el año que viene no servirán ni de coña. Porque un abrigo puede ponerse aunque vaya un pelín justo de mangas... pero los zapatos... ni hablar.

Luego están las chaquetas! Las grandes olvidadas. Esas que usamos normalmente cuando hace calor para llevar abrigo... pero aún no hace tanta como para ir directamente en camiseta... sobre todo a primera hora de la mañana. Ahora, con el horario de salida de paseo que tienen los niños... como para sacarlos con chaqueta!!!

No había comprado ninguna nueva, pero para la niña me habían dado un par que pensaba aprovechar. Y para el niño...lo mismo! Pero va a ser que no. Las vi el otro día al hacer el cambio de armario... y ni las saqué. A saber si el año que viene les van a caber.

Compadezco a las familias que habían hecho el gasto... en serio... las compadezco mucho. Dinero "tirado".

No creo que saquemos partido a las camisetas de manga larga. Si sigue el calor, pasaremos en un par de días a la manga corta. 

En total, abrigos, chaquetas, pantalones largos, jerseys (a Erik le acababan de regalar uno!), leotardos (justo le había comprado unos monísimos a Helia), y zapatos que van a ser desechados el año que viene sin darles uso.

Da mucha pena. Lo único bueno.... es que podré pasarlos nuevos a otras familias que podrán sacarles mayor partido. Pero de todos modos, este año... ha sido un dinero muy malgastado.

Mi ropa la guardaré, y trataré de no cambiar mucho de talla... para que el año que viene me siga quedando bien y la pueda seguir aprovechando. Porque lo de ir o no a la moda... o con ropa de temporada... a mi hace mucho que me da del todo igual.

¿Y tú? ¿Qué prenda o prendas se te ha quedado casi nueva en el armario? ¿Y a tus hijos?