Ayer, mi pequeña princesa, cumplió cinco años.
Parece mentira, el eterno bebé, poco a poco va creciendo... y un día se convertirá en una niñita de traviesa e inteligente mirada.
Pese a tener ya cinco añitos, sigue siendo pequeña, como si se negara a crecer. Aún con su lengua de trapo, que a veces resulta imposible de entender, y con esas rabietas y cambios de humor repentinos. Cuesta creer que ya sea de los mayores del patio de infantil!
Exploradora incansable en la montaña, siempre dispuesta a encontrar flores! |
Con ella llevo ya cinco años de duro aprendizaje, puesto que cada día me da una nueva lección. A veces creo que su propósito en el mundo es desmontarme para volver a armarme de nuevo, en una especie de versión mejorada.
Con ella aprendí que aún siguiendo las mismas rutinas y costumbres con dos bebés, el resultado que obtengas no tiene porque ser ni remotamente parecido. Aprendí que la paciencia es un lugar que apenas había explorado y que parece tener dimensiones infinitas. Aprendí que aunque ella parezca no conocer los límites... yo si que los tengo... y que a veces.... tras un duro día de trabajo, al entrar en casa y encontrarla desafiante... toda la psicología escapa por la ventana y sólo me queda la frustración de no acertar a manejar la situación.
Cada día descubro cosas nuevas. Como que tras su risa alocada se esconde un gran corazón, que aunque a veces se pierde en una rabieta tonta con su hermano, luego te sorprende cediéndole sin apenas resistencia un objeto preciado para consolarle si le ha pasado algo.
Su capacidad de imaginación no conoce límites. Es capaz de inventar un nombre de la nada para su nueva muñeca, y una historia de consuelo basada en dudosos hechos reales si la situación lo requiere.
El otro día, su hermano lloraba porque iba atrasado con una tarea escolar y estaba agobiado... y ella le decía: a mí también me pasa que me atrasan los deberes (ella... no tiene deberes....) y yo me digo tranqui, no pasa nada, y hablo con la señorita.
No creo que su hermano apreciase el gesto... pero a mí no me pasó desapercibido.
Así mismo, es capaz de estar aparentemente distraída, y luego haberse enterado de todo lo que ha pasado en una habitación. O de llorar desconsolada porque le has hecho pupa al rozarla con una pierna al pasar, y estar impasible mientras el dermatólogo le quema unas verrugas con nitrógeno líquido, o le arranca un molusco de cuajo.
Y es que mi niña es una contradicción con patas: risueña y llorosa, atolondrada y serena, inteligente y tontorrona, egoísta y generosa... Cambiante, a casa instante! Capaz de ponerse una falda de tul rosa con una sudadera de Star Wars y unas bambas y estar tan digna... y tan mona!
Con los patines... gritando porque tiene miedo, riendo porque se divierte! |
Por eso aunque me saque de mis casillas... y a veces... a veces... buuuuuufffffffffff, la quiero hasta el infinito y más allá. Porque es única, y quiero que siga desmontando mis teorías y que siga removiendo mis cimientos.
Porque con ella sabes como empieza el día, pero nunca como acaba! Y hasta ir al baño puede ser toda una aventura que acabe con una gran desastre o echándonos unas risas.
Este año no he estado a su lado todo lo que debería... la primera mitad el trabajo y los horarios imposibles hicieron que nos viéramos poquito, y ahora con el tema médico de su hermano... creo que no estoy suficientemente a su lado. Ayer, para su cumpleaños, quería estar con ella y que tuviera una tarde especial. Pero me la pasé con fiebre y hecha unos zorros... mirándola de lejos, abriendo sus regalos.
Este Helia, no ha sido nuestro año. Pero espero que el nuevo que empieza, con mi minijornada laboral y una vez encarados los temas de salud de tu hermano, espero poderme acercar más a ti y seguir descubriéndote, porque eres una persona maravillosa, digna de conocer.
No dejes nunca de mirar a tus hijos, descubrirás cosas a cada instante, no dejes nunca de escucharles, aprenderás más de lo que jamás hayas leído. Y sobre todo... toma tila!
Qué tierno!!!❤️❤️❤️
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminartienes toda mi admiración. Lo de madre superada, nada, eres una madraza!
Petonetsss