13 may 2020

Calabaza Rellena a lo Madre Superada

Esta receta la tenía en el tintero des el mes de otoño... y aunque ahora no es la mejor época del año para compartirla... como tengo tiempo para escribirla he decidido lanzarme antes de que caiga en el olvido!

Saqué la receta de la revista de Caprabo del pasado otoño. Como siempre que busco una receta, había algunos ingredientes de la original que no me acaban de convencer... así que acabé haciendo mi propia versión.

Calabaza rellena, lista para degustar!

Una receta genial para tiempos de castañas y Hallowen! Aunque si tienes los ingredientes... realmente cualquier momento es bueno para hincarle el diente. 

INGREDIENTES:
  • 1 calabaza de las alargadas (tipo violín)
  • 1 cebolla
  • 100 gramos de brotes de espinacas (yo los compro de bolsa)
  • 100 gramos de queso ricotta
  • 50 gramos de queso rallado (del tipo que te guste)
  • orégano, sal y AOVE
Calabaza violín partida por la mitad

PREPARACIÓN:

Ponemos el horno a precalentar a 250 grados.

Lavamos la calabaza y la partimos por la mitad. Ya te aviso que al menos a mí, nunca me salen dos mitades iguales... Pero hay que intentarlo!

Quitamos las semillas, y luego sacamos parte de la pulpa. Eso tampoco es tarea fácil. La calabaza es dura... muy dura! Así que prepárate a sufrir! Yo voy cortando con un cuchillo y luego hago palanca con el mismo cuchillo para sacar trozos, y así consigo vaciarla bastante.

Nos ponemos un chorrito de Aceite de Oliva Virgen Extra en las manos, y lo untamos en la piel de la calaba, sí sí, por la parte externa, la dura!. Y metemos las dos mitades de la calabaza en el horno durante 15 minutos a 250 grados. Esto es para que la cáscara se ponga blandita.

Mientras, picamos la pulpa de la cabaza, pelamos la cebolla y la picamos también.

Ponemos un par de cucharaditas de aceite en una sartén y sofreímos la cebolla y la pulpa de la calabaza durante unos 10 minutos.

Vigilamos el tiempo de las calabazas!!! Probablemente ya casi hayan pasado los 15 minutos, y deberemos sacarlas del horno y dejarlas a un lado. Cuando las saquemos, bajaremos la temperatura del horno a unos 180 grados y lo dejaremos encendido.

Añadimos un poquito de sal y orégano al gusto, así como las espinacas y lo cocinamos todo durante 10 minutos más.

Vertemos el sofrito en un bol y agregamos los dos tipos de queso. Lo removemos todo bien, para que se forme una "masa" y rellenamos con ello las calabazas.


Mezcla de ingredientes lista para rellenar las calabazas!


Una vez rellenas, volvemos a meter las calabazas en el horno a 180 grados durante otros 15 minutos.

Y.... listo! Deliciosas para saborear! Una receta muy original con un sabor delicioso.

CURIOSIDAD: cuando preparé la receta por primera vez, no entendía porque las cáscaras de la calabaza tenían que cocinarse... con lo dura que es su piel... jamás se me había ocurrido que fuera comestible. Pero vaya si lo es! Tras pasar por el horno queda tierna y comestible. Ahora bien, ya te digo que jamás me la he podido comer entera! Cuando preparo esta receta le pongo media calabaza a mi marido y me quedo yo la otra mitad. Empiezo comiendo cáscara y relleno... pero a la mitad, dejo de lado la piel y me centro en el relleno, porque la receta es muy saciante! Así que, o vas con mucho apetito, o no te la comes entera!

¿Y tú? ¿Sabías que la cáscara de la calabaza se puede comer? ¿Te animas a probarla?


12 comentarios:

  1. Tiene una pinta estupenda. Un beso

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  2. Oye pues llama la atención esta receta, jajajja. La calabaza me gusta en algunas cosas en otras no. Es un ingrediente raro, jajajaja. Pero me gusta.
    besotes, guapa

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    1. Es un ingrediente peculiar. He de reconocer que a mi no me gusta "en todo"...pero esta receta me llamó mucho la atención y no me arrepiento para nada de haberle dado una oportunidad.
      Abrazos!

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  3. Está receta tiene que estar buenísima es totalmente del estilo de platos que me gustan!!

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    1. Me alegro mucho! Es un plato diferente y original...pero si te atreves a probarlo yo creo que te puede gustar.
      Un abrazo

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  4. Me ha parecido realmente interesante. Lo de las cáscaras fue una sorpresa, nunca se me habría ocurrido cocinarlas...es más yo las tiro.

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    1. Para mí también fue una sorpresa inesperada! Según iba preparando la receta.. no entendía porque debía meter las cáscaras en el horno...pero lo hice y luego no me arrepentí. Y la verdad es que para servir la receta, ponerla dentro de las cáscaras le da muy buena presencia.
      Luego ya es decisión del comensal si se atreve a comerlas o no...
      Un abrazo

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  5. Espectacular. Nunca se me habría ocurrido hacer esto. Ya sabes que acabo de robarte la idea, jejeje

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    1. Me parece genial que me la robes!!! Disfrútala!
      Abrazos

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  6. Seguro que tu versión está mucho mejor que la original jajaja, te ha quedado espectacular y muy curioso lo de la cáscara, yo tampoco hubiera pensado que quedara tierna y se pudiera comer, me la apunto, besos.

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    1. La original llevaba granada... y no me acababa de convencer la mezcla... Lo de la cáscara fue toda una sorpresa. Me lo dicen y no me lo creo!
      Ya me dirás si la pruebas. Abrazos

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