27 mar 2018

Va a ser que no estoy bien

Pues va a ser que no, que aún no estoy bien. ¿Qué le vamos a hacer? Cada uno tiene sus ritmos, a la hora de encajar los golpes que te va dando la vida, y aunque queramos acelerar los tempos y decir que aquí no ha pasado nada... la procesión va por dentro y sale cuando menos te lo esperas.

Hace unos días fui a la consulta del dermatólogo (sigo buscando la causa de mis picores de pies) y tras descartar cualquier tipo de causa evidente (hongos, dermatitis...) decidió mandarme a hacer análisis de sangre para seguir jugando a la táctica del descarte.

Y mientras me preparaba los papeles, me miró y me preguntó: ¿Porque, tú como estás?. Así, sin más. Una pregunta sencilla, de esas a las que suelo responder con una sonrisilla y con un: yo?, bien, bien, claro, tirando.

Pero sin saber porque, la pregunta se me quedó atragantada, y las lágrimas se arremolinaron en mis ojos, luchando por salir.


Ahí, es cuando yo pensé, ¿no te irás a poner a llorar en la consulta del dermatólogo? Y una voz respondona en mi interior respondió: pues que te juegas a que sí!

Por suerte, me tragué literalmente mis lágrimas, y conseguí dibujar la estúpida sonrisa de marras y responder: la verdad, no estoy en mi mejor momento, pero voy tirando.

Fue un ejercicio de autocontrol, inconsciente y rápido, pues la escena no duró ni unos segundos.

Salí de la consulta con mis papeles para la analítica y creyéndome ya libre de aquel estúpido momento de crisis. 

Pero nada más lejos de la realidad. Nada más salir del centro médico empecé a escuchar mi respiración cada vez más agitada, como si hubiera hecho una maratón! La vista literalmente se me nubló, y mientras me arrimaba a una pared y me apoyaba en ella para sostener mi cuerpo, supe que estaba sufriendo un ataque de ansiedad en toda regla. 

La pared sostuvo mi cuerpo... pero no había nada que sostuviera mi mente. Cuando me calmé, fui a la farmacia, mientras sentía que, ahora sí, las lágrimas resbalaban por mis mejillas.

Logré calmarme a tiempo para volver a entrar sonriente y calmada en la farmacia... de vuelta a la rutina y la "falsa mejoría".

Menuda bofetada de realidad! Yo pensaba que estaba bien, que ya estaba todo superado... y resulta que no, que ante una pregunta sin importancia, mi coraza se rompe y se resquebraja en mil y un pedazos y me siento al borde del abismo.

Sé que últimamente me he alejado de todo, sé que hay personas de mi entorno que han necesitado mi apoyo y no lo han tenido. Pero es que para poder ayudar a alguien, primero tienes que estar tu bien, y sentirte fuerte. Porque cuando tienes una herida y estás sangrando, no puedes entrar en quirófano a operar a otro... tienes que pararte y buscar el botiquín y curarte tu primero... o tumbarte en el suelo y dejar que otro te cure... no hay más.

Aún necesito tiempo, y sé que mis heridas se van a curar... pero hoy no están curadas, y en cuanto antes lo asuma y me ponga a buscar el botiquitín, mejor me irá! 

10 comentarios:

  1. Un abrazo Vanesa...
    Besotes mil y ya sabes, te lo digo siempre y no me quiero hacer pesada.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias. Tiempo....una sola palabra que significa tanto...
      Abrazos!

      Eliminar
  2. Tiempo, tiempo es lo que necesitamos para curarnos bien del todo. Y tiempo es lo que te va a dar la gente que te quiere. Ánimo Vanesa!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso espero! Que sepan que no los tengo abandonados...que me puedan esperar un poquito más...
      Un abrazo preciosa

      Eliminar
  3. Mucho animo guapa!! Ya verás como muy pronto estarás mejor y es normal para este año q llevamos pero aún se está a tiempo para q mejore.
    Un abrazo enorme a los 4!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguro que el año mejorará. Y yo con él!
      En seguida os alcanzo 😉
      Un abrazo

      Eliminar
  4. Es muy duro y muy dificil. Darte cuenta de que no estás bien, de que tu cuerpo te pide a gritos quitarte esa careta que ponemos de cara al mundo... yo desde mi rinconcito te mando cariño y fuerzas... no me sobran pero me puedo hacer una idea de cómo te sientes. Es duro, pero puedes seguir luchando, ánimo, mucho ánimo y fuerzas :*

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Seguro que tu me entiendes bien. Es duro sentirte débil y reconocerlo ante los demás. Pero tarde o temprano se acaba saliendo de todo.
      Un abrazo fuerte y muchos ánimos a ti también!!!

      Eliminar
  5. Es muy fácil decir lo de :ánimo! todo irá bien... pero es menos fácil hacerlo.
    Se que nada de lo que te diga te va a ayudar, pero poco a poco, cada pequeño avance es un triunfo, céntrate en la sonrisa de tu peque y en los pequeños momentos que día a día, pasamos por alto.

    Un besado enorme

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me ayuda lo que me dices! Y tanto que sí! Siempre ayuda ver las cosas desde otra perspectiva.
      Trato de centrarme en las cosas buenas, y como dices en la sonrisa y la vitalidad de mi pequeño, que siempre nos da ejemplo con su modo de enfrentarse a las cosas.
      Un abrazo!

      Eliminar

Por la entrada en vigor del Reglamento General de Protección de datos te informo que al pulsar en el botón de "publicar" estarás aceptando la política de privacidad de este sitio.
La única finalidad es gestionar y moderar los comentarios. Tus datos estarán ubicados en los servidores de Blogger y no serán utilizados con fines comerciales ni publicitarios.
Responsable: Vanesa A.
Contacto: diariodeunamadresuperada@gmail.com