Albóndigas con Calamares

 A veces una tiene ganas de probar cosas nuevas en la cocina, y le da por buscar, por aquí y por allá, en libros y revistas que tiene por casa, alguna cosita nueva con la sorprender a los comensales.

Revistas como "Sabor" de Caprabo, o "Cocina" de Lecturas, me sirven muchas veces de inspiración para sacar nuevos platos. 

Y así fue como encontré esta receta que me llamó mucho la atención por la combinación de mar y montaña que tiene. Como siempre me faltaban ingredientes, y algunas cosas no me convencían... e hice mi propia versión de las Albóndigas con Calamares.

Albóndigas con Calamares

INGREDIENTES:

• 400 gramos de calamares (yo utilicé congelados, ya cortados en anillas)
• 1 bandeja de albóndigas (si, las compro ya hechas)
• 150 gramos de guisantes
• 400ml de agua
• una pastilla de caldo de pollo
• 100 ml de tomate frito
• 1 cucharada de pulpa de ñora
• Aceite y Sal 

Puedes, por supuesto, comprar los calamares frescos, limpiarlos y cortarlos; así como preparar tus propias albóndigas con la carne picada que más te guste. Yo, para ahorrarme trabajo y tiempo... suelo comprarlas hechas. Pero todas las opciones son válidas!

En cuanto a los 400 ml de agua y la pastilla de caldo de pollo.... puedes sustituirlas por 400 ml de caldo de pollo envasado o preparado por ti. Yo en este caso opté por la pastilla porque no tenía ni lo uno ni lo otro. Aunque si hubiera tenido mi propio caldo hecho, lo habría usado sin dudar!

PREPARACIÓN: 

En mi caso, lo primero que hice fue poner a calentar 400ml de agua con la pastilla de caldo de pollo dentro, para que se fuera deshaciendo. Pero si tienes caldo hecho... basta con que lo pongas a calentar con el fuego al mínimo en este momento... o un poco más adelante.

Freímos las albóndigas en abundante aceite, hasta que estén bien doraditas. Conforme estén las vamos sacando y las reservamos en un plato con un poco de papel de cocina en el fondo para que absorba el aceite sobrante. 

Ponemos en una cazuela un par de cucharadas de aceite y freímos en él las rodajas de calamar (si los usas congelados, como yo, recuerda descongelarlos antes!!!). 

Cuando los calamares están listos, añadimos las albóndigas y la cucharada de pulpa de ñora (yo le puse una de tamaño postre, pero como tiene un gusto fuerte...si no tienes claro que te vaya a gustar, puedes poner una cucharadita tamaño café, o incluso prescindir de este ingrediente). 

Mezclamos todo un poco, e incorporamos la salsa de tomate. Removemos todo para que se mezclen bien los sabores, y añadimos el caldo caliente y los guisantes (yo los añadí directamente congelados, no hay problema). 

Añadimos un poco de sal (siempre puedes añadir más después si ves que te queda soso), y dejamos que se guise todo durante unos 25 minutos.

Y listo!!!! Es un poco más elaborado que otras recetas que suelo compartir... pero vale realmente la pena! Y si utilizas como yo algunos ingredientes congelados o preparados... te ahorras bastante tiempo y dificultad.

En casa la receta triunfó totalmente! Mi hija hasta repitió y casi nos deja sin albóndigas a su padre y a mi! La verdad es que fue una buena manera de que los peques probasen sabores diferentes a los habituales. 

¿Y tú? ¿Te vas a animar a probar?